A Argentina le tocó el grupo de la muerte y a España el de la vida

Curiosísimo el mundo del fútbol. Tanto tiempo esperando la fecha para el sorteo de los grupos del mundial de Alemania 2006 de este próximo verano y cuando se conocen los grupos, apenas se oyen comentarios. Yo me esperaba mucho más, pero el fútbol, ese deporte que no da tregua ningún día del año, ya estaba generando noticias del próximo partido y la cuestión del sorteo se quedó en mera anécdota.

He esperado algunos días para escribir estas líneas para conocer algunas opiniones más, pero he de reconocer que no ha sido para lanzar cohetes. Me esperaba muchísimo más.

Leo Messi, jugador del Barcelona y de la selección argentina comentaba tras conocer los rivales que "han preparado el sorteo para favorecer a Alemania y a Brasil". Ésta si es buena. La frase me huele que va preparando el camino ante una posible caída en la primera fase como les ocurrio en Corea-Japón. Reconozco que sobre el papel les ha tocado un grupo durísimo, pero si tenemos en cuenta que gana la copa del mundo la selección que mejor juega del mundo, es lógico pensar que ganará a cualquier equipo y que los nombre de las selecciones le tienen que dar igual, pero por lo visto, la suerte influye muchísimo en esto del fútbol. Árbitros ciegos, bizcochables, goles con la mano y el sorteo. Si tanto influye la suerte, ¿Por qué no se reunen las selecciones en Montecarlo y se juegan el mundial en el casino al poker o a la ruleta?

El seleccionador español, Luis Aragonés, fue un poco más allá y tras conocer las selecciones que nos han tocado dijo que "me preocupan los cruces". Este tío ya supone que vamos a pasar la primera fase sin despeinarnos. Algo así como que la FIFA sería muy injusta si obligara a España a jugar la primera fase porque vamos muy sobrados de todo.

El grupo que nos ha tocado no es el grupo de la muerte de Argentina, pero tampoco es una bicoca. Túnez es campeona de África, Ucrania se clasificó la primera por méritos propios y con una apabullante superioridad y Arabia Saudí se ha gastado muchos petrodólares para conformar un equipo que no haga el ridiculo como en anteriores mundiales y supongo que darán algo de guerra.

Puestos a recrearnos como siempre en el cuento de La Lechera, si pasamos la primera fase, cosa harto dudosa tal como está jugando la selección, nos enfrentaremos si todo sale según lo previsto a Francia o Suiza y si ganamos el partido de octavos, en cuartos nos esperan o Brasil o Italia con la rebaja. Si seguimos soñando un poco más que para eso es gratis, en la final nos encontraríamos con Inglaterra, Alemania o incluso Argentina si consigue sobrevivir al grupo de la muerte.

Luego estarían las selecciones que van de humildes y, a priori no llegan con el halo de galácticas y dan sorpresas. Pero eso es otro cantar. Lo bueno, dentro de lo malo es que en el camino no nos encontraremos con los anfitriones, Alemania ni con árbitros caseros, marinados y bizcochables como nos ocurrió con Corea hace cuatro años.