Hay series que te gustan desde el principio y otras que empiezan a aburrirte desde el primer minuto. La inmensa profusión de títulos, tal como comenté al hablar del Juego del calamar, no está correlacionada con la calidad de los mismos.
Con El padrinos de Harlem, volvemos a encontrar ese equilibrio perfecto entre una serie bien hecha, una trama bien construida y un reflejo de la historia muy bien contado en el proyecto de la producción.
La serie está ambientada en los años 60 en Nueva York básicamente y nos cuenta las andanzas de un personaje real, Bumpy Johnson, un mafioso que peleó junto a las cinco familias italo americanas por el control de la ciudad en medio de conflictos raciales, de derechos civiles y del reflejo de una época que cambiaría la forma de ser del americano medio.
Malcom X, Kennedy, FBI, congresistas corruptos, jazz, soul y un recorrido por una década apasionante.
Aunque he leído críticas negativas de la serie, básicamente porque se intenta comparar o igualar esta producción a otras del genero mafioso, creo que es una gran producción que consigue llevar el equilibrio de mostrar una historia real con los toques de ficción que debe tener un producto de estas características para enganchar al gran público.
Si quieres conocer de primera mano las andanzas de buena parte de los personajes que pulularon por el Nueva York de los años 60 y pasar un buen rato, creo que estás ante la mejor elección.
La serie merece la pena y, si quieres combinar la historia con la diversión, esta es una mezcla perfecta. Por ello te la recomiendo.
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