Acabo de terminar de ver la cuarta y hasta este momento última temporada de Juego de Tronos, fantástica producción de HBO y la serie sigue mejorando a pesar de que cada nueva entrega pone el listón más alto. La quinta temporada están ahora mismo rodándola en Sevilla y sus alrededores.
La exitosa saga Canción de fuego y hielo del escritor norteamericano Georges R. R. Martin no deja de sorprendernos y cada nuevo capítulo es un verdadero festín para los ávidos seguidores de la que se está convirtiendo en una de esas series de culto de la que se hablará mucho después de su culminación. Aunque todavía queda mucho por contar y, de hecho Martin, todavía sigue escribiendo libros de la saga. De hecho le han planteado en alguna ocasión si será más rápìdo escribiendo que los productores rodando.
Como suelo hacer habitualmente no te voy a desvelar absolutamente nada de la trama de esta cuarta temporada, pero si te digo que me ha parecido una de las mejores, si no la mejor.
He disfrutado mucho viendo cada capítulo y ahora que hay que esperar al menos hasta Abril de 2015 para comenzar a ver algo de la quinta temporada, tendré que buscar tramas nuevas, series distintas y argumentos que no tienen nada que ver, pero afortunadamente cuando termina un título, comienza otro y viceversa.
A ver si de una vez por todas Netflix llega a nuestro país y se puede seguir en condiciones una serie. Con las SGAEs de turno que no ven más allá de su nariz, no creo que lo veamos pronto, pero si quieren seguir disparándose en los pies y negarse a reconocer que el futuro ha llegado ya y esta vez para quedarse, allá ellos. Luego que no se quejen. También pueden hacer como los editores de AEDE y exigir que una parte de los presupuestos del Estado vaya a sus bolsillos por el dinero que dicen que pierden al seguir manteniendo un negociete que ahora va por otros derroteros.
Si no la has visto, no te la pierdas que es una de esas series que merece mucho la pena ver y la disfrutarás, te lo aseguro.
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