El CIS presentó su última encuesta de intención de voto con algo más de lo mismo. Aunque si tenemos en cuenta el tipo de cocineros que se encargan de aderezar el plato, la deducción es clara: A pesar del desgaste del partido en el Gobierno, todavía hay más de un 30% que tiene intención de seguir votándolos en las próximas elecciones.Ahora mismo si se celebraran las Elecciones Generales el PP superaría por 10 puntos al PSOE y alcanzaría la mayoría absoluta.
Aunque no suelo tener muy en cuenta este tipo de encuestas, sí que es bueno conocer la tendencia que se va manifestando y la conclusión es que el PP dormitando y echándose la siesta plácidamente, cuando no actúa de cómplice del propio Gobierno, no consigue una distancia que todo lo que está ocurriendo invitaría a pensar.
He estado dándome una vueltecita por foros y opinódromos para comprobar qué opina la peña sobre estos datos y, aunque sigo observando mucha crispación, ya no encuentro a votantes convencidos como antes. Ahora están floreciendo los votantes a la contra que sólo votarán a unos para que no salgan los otros y viceversa.
Como vivimos en un país tan exageradamente surrealista como España, en las próximas elecciones podría ocurrir casi de todo. Observo con pena, cuando no asco, como en torno al 80% de los encuestados tienen intención de votar a una de las dos formaciones que controlan a pachas el sistema, siempre según la misma encuesta.
Probablemente muchos que ya no podrán votar o incluso pasarán de todo, serán los miles de jóvenes preparados que están buscando un trabajo de lo que sea por entornos menos corruptos de la vieja Europa. Ayer se me cayó el alma a los pies cuando vi una larga cola de candidatos a una de las plazas para trabajar en DisneyLand Paris. Españoles muy bien preparados que, con un poco de suerte, encontrarán un trabajito de camarero o mascota. Todo muy prometedor, desde luego.
La imagen la encontré en Carne Cruda.
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